El Museo de Huesca y Libelium colaboran en la conservación de bienes culturales

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Ayer día 16 de julio se presentó en una rueda de prensa conjunta entre Fernando Sarría, director del Museo de Huesca, y Alicia Asín, CEO de la empresa tecnológica Libelium, un pionero proyecto de colaboración que aúna patrimonio y tecnología a través del Internet de las Cosas.

Mediante dos sensores denominados Plug & Sense se miden las condiciones de luz, humedad y temperatura de dos de las obras más emblemáticas del museo como son el tapiz de Roda de Isábena y el Tiraz de Colls.

Esta medición se transmite a Internet a través de una conexión 4G y los datos recopilados llegan en forma gráfica a una página web, lo que permite su análisis en tiempo real y ser visualizados en cualquier lugar, solo es necesario tener un dispositivo con acceso a Internet.

La elección de textiles para este proyecto no es casual. Los tejidos son materiales muy sensibles lo que ha supuesto también que se conserven pocos, de ahí su excepcionalidad y la importancia de minimizar su deterioro natural a través de un seguimiento constante e inmediato de las condiciones medioambientales en las que se encuentran, ya que dada su fragilidad necesitan conservarse dentro de unos parámetros de luz, humedad y temperatura muy específicos para evitar daños irreversibles.

Hemos comentado en otras ocasiones la vital importancia que para las colecciones de museos tiene la denominada conservación preventiva o aquella que se aplica sobre el entorno de los bienes culturales garantizando unas condiciones estables y adecuadas de preservación. Con este proyecto el Museo de Huesca se sirve de una tecnología puntera para mejorar el control de estas condiciones y la preservación de las piezas, pues las colecciones son la razón de ser de los museos y su conservación es una de nuestras funciones primordiales puesto que garantiza que tanto las generaciones actuales como las futuras puedan disfrutar de los bienes culturales que custodiamos.

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